Una plaga inesperada: Vox, Campofrío y el triunfo de lo políticamente incorrecto
2019 ha arrancado con una gran paradoja: tanto fijarnos en la amenaza de lo políticamente correcto… y resulta que al final lo que triunfa es lo políticamente incorrecto. Jair Bolsonaro, reluciente presidente brasileño de extrema derecha, lo dijo alto y claro el primer día del año en su toma de posesión: prometió “liberar” a Brasil de lo “políticamente correcto”, como si el principal problema del país ya no fuera la desigualdad social, sino no poder contar chistes sobre negros, maricas y feministas por el miedo al que dirán. “Con humildad y honor me dirijo a todos ustedes como presidente de Brasil y me presento ante toda la nación hoy como el día en que el pueblo empezó a liberarse del socialismo, a liberarse de la inversión de valores, del gigantismo estatal y de lo políticamente correcto”, dijo Bolsonaro a las masas, palabras interpretadas así por la analista Eliane Brum en un artículo en ‘El País".